Palau de la Música Catalana - Barcelona, Barcelona

Paco S.

Increíble monumento considerado hoy en día Patrimonio de la Humanidad y entre los más altos exponentes de los edificios modernistas de Barcelona. Su decoración es exquisita, simbólica y muy imaginativa. La visita guiada dura unos 50’ y ha merecido bien la pena. 👍

Yaiza M.

La fachada del edificio es impresionante, merece la pena pararse unos minutos. Además se puede entrar en el vestíbulo principal para ver las columnas y techos. Sin embargo no merece la pena pagar la entrada para ver solo una sala de conciertos a pesar de que sea muy bonita con un impresionante órgano. Bajo os dejo unas fotos

Cuenta P. M.

Impresionante.
Muy bien conservado.
Es más pequeño de lo que me imaginaba, pero mejor.
Estaba esperando a conocerlo cuando viniese un artista que me gustara.
Y me ha encantado, tiene un acústica que es un lujo para disfrutar de cualquier concierto.
Es verdad que para la visión es mejor zona de abajo o primer piso, resto es desaconsejable.

Alejandro A.

El edificio una autentica joya y el concierto fantástico…. Pero es una autentica vergüenza q en los asientos de tribuna de platea pongan tres filas de asientos en las q no me entran las piernas. Un establecimiento como este debería velar mas por el confort de los usuarios y no por sacar algo mas encasquillando espectadores donde no caben

Mariana G.

Experiencia increíble. Un lugar mágico. Otro exponente del modernismo catalán. Y un espectáculo de primera. Muy recomendable.

Eloi M. C.

El Palau de la Música Catalana es, sencillamente, un lugar mágico. Asistir a un concierto aquí es mucho más que escuchar música; es vivir una experiencia que envuelve todos tus sentidos. La acústica es impecable, cada nota parece flotar en el aire con una claridad impresionante, como si el espacio hubiera sido creado exclusivamente para magnificar la música.

Pero lo que realmente hace especial al Palau es su arquitectura. Desde el momento en que entras, te rodea una explosión de color y detalle. Es una obra de arte en sí misma: vidrieras llenas de luz, mosaicos que parecen cobrar vida, columnas decoradas con motivos florales... Mires donde mires, hay algo que te sorprende y te maravilla. La gran claraboya central, con su forma de cúpula invertida, es el corazón del lugar, dejando pasar la luz de una forma casi mágica.

Además, el ambiente es único. Se siente la historia y la pasión con la que se construyó este lugar, y eso lo hace aún más especial. No importa si vas a un concierto de música clásica, jazz o cualquier otro género, el entorno eleva la experiencia a otro nivel.

Si visitas Barcelona, el Palau de la Música Catalana no puede faltar en tu lista. Tanto si asistes a un concierto como si haces una visita guiada, es una oportunidad para disfrutar de lo mejor del modernismo catalán. Totalmente recomendable, un lugar que deja huella. ⭐⭐⭐⭐⭐

Jose M. R. G.

El domingo 24/11 fue la jornada de puertas abiertas en el Palau de la Música (lo pagado era donación a su obra social Palau Vincles) y pude ver esta joya inigualable del Modernismo, obra de Lluís Domènech i Montaner, repleta de pequeños y grandes detalles decorativos - capiteles florales, columnas de baranda recubiertas de vidrio, etc. -. En resumen, fascinante y altamente recomendable su visita.

Ati R.

El interior es muy bonito. Muy hermosa arquitectura en el interior, por el bien de ver que vale la pena ir. Lo único es que he ido a tantas actuaciones que era muy chulo, pero no funcionan nada bien con la puesta en escena de las luces.